Inflamación de encías en niños y jóvenes
El cuidado de las encías es muy importante: descubre por qué
Las encías forman parte de lo que conocemos como “periodonto” y son una fibromucosa que rodea y abraza a los dientes, tanto temporales como permanentes. Su papel principal es la protección del hueso, el ligamento periodontal y los tejidos que soportan los dientes. Por ello, la salud de las encías es un factor primordial para la salud bucal en general.
Aunque algunos niños o adolescentes manifiestan signos de enfermedad del periodonto (encías inflamadas, rojas, recesiones gingivales y sangrado espontáneo o al cepillado), como estas patologías no suelen doler en sus estadios iniciales, con frecuencia las familias no son conscientes de este problema hasta que no visitan al odontopediatra o dentista infantil. Es decir, a menudo no se detecta de manera temprana.
¿Cómo detectar un problema de encías?
Las primeras etapas de la enfermedad gingival se presentan en los pacientes infantiles con un sangrado gingival durante el cepillado, o a veces espontáneamente, a causa de la gingivitis producto de un acúmulo de placa por una higiene oral deficiente, ya que el paciente infantil no suele dominar las técnicas de cepillado.
También es cierto que existen ciertos factores genéticos y locales que se ven implicados en la enfermedad gingival, como el tratamiento con aparatología fija aumenta de forma temporal los índices periodontales y estimula el crecimiento de las bacterias que producen enfermedades periodontales.
Por otro lado, en ocasiones la gingivitis aparece inducida por fármacos como algunos antiepilépticos, inmunosupresores, y antagonistas del calcio u otros medicamentos de origen fúngico, viral o bacteriano.
¿Cómo tratar los problemas de encías?
Los problemas gingivales iniciales suelen solventarse con la eliminación de la placa bacteriana, con la que desaparecerá la gingivitis, y por ende el sangrado.
Una correcta instrucción acerca de las técnicas de higiene dental e interproximal permiten que el proceso sea autolimitado y no ocasionar problemas en el futuro. Los odontopediatras recomendamos en todos los casos no dejar de cepillar por el sangrado, ya que se acumulará más placa bacteriana en la zona del diente que está en contacto con la encía y el sangrado no solo no cesará, sino que será más intenso.
La supervisión del cepillado por parte de los familiares o cuidadores es una de las piezas clave para lograr una higiene óptima de dientes y encías. En muchas ocasiones, es necesario llevar a cabo inicialmente una higiene o profilaxis profesional en la clínica dental infantil acompañada de enjuagues de clorhexidina durante un corto periodo de tiempo.
Por otro lado, con menor frecuencia, los niños o adolescentes pueden presentar periodontitis, que se diferencia de la gingivitis en que ya existe pérdida de tejido de soporte (encía o hueso). El tratamiento en estos casos consiste en el establecimiento de una muy buena higiene oral. A veces también se acompaña de higienes o raspados profesionales, enjuagues o geles de clorhexidina y/o antibioterapia. En casos más importantes puede ser necesaria la cirugía periapical.
Las revisiones dentales regulares por parte de un dentista infantil son una de las mejores defensas para prevenir la enfermedad gingival en Odontopediatría. Sólo de esta forma podremos detectar los primeros signos de la patología de las encías. Con ello, propondremos el plan de tratamiento correspondiente para lograr una salud oral óptima para tu hijo.
Referencias: